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El sábado después de las 15 personal policial de la comisaría 30, se constituyó en un domicilio de la primera cuadra de la calle Casimiro por un joven que se encontraba en estado alterado dentro de su hogar. Cuando los efectivos se hicieron presentes, la madre del mismo, hizo entrega de una mochila perteneciente a su hijo que tenía en su interior dos armas de fuego y un envoltorio con Cocaína.
Inmediatamente se dio conocimiento al Fiscal en turno quien dispuso la intervención de la Delegación de Toxicomanía y del Gabinete de Criminalística para realizar las diligencias necesarias.
Consecuentemente a esto, se encontró un arma calibre 22 y otra calibre 380 junto a 280 proyectiles de diversos calibres. Además se secuestraron 522 gramos de Clorhidrato de Cocaína.
Ante esta situación, se inició una causa con intervención del Fiscal en turno y del Juzgado Federal.