Un efectivo de la Policía de Río Negro con la ayuda de un vecino detuvo a un ladrón que junto a otros dos delincuentes tanteaban autos estacionados en inmediaciones del kilómetro 17,500 de la Avenida Bustillo.
El uniformado observó a un hombre en actitud sospechosa que descendió de un vehículo en una playa de estacionamiento y comenzó a tantear las puertas de los autos que estaban allí, con claros fines delictivos.
Los cómplices que quedaron a bordo se percataron de la presencia policial y huyeron en dirección al oeste, mientras que el tercero fue reducido por el uniformado y un vecino que circunstancialmente estaba allí.
El hombre forcejeó con ambos y golpeó al efectivo policial en el rostro, aunque no logró escapar. Fue trasladado a la dependencia policial, donde se iniciaron actuaciones por hurto en grado de tentativa y resistencia a la autoridad.
El detenido utilizaba tobillera electrónica debido a que debía cumplir prisión domiciliaria por otros hechos delictivos anteriores.