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Desde hace 96 años la Banda de Música de la Policía inició su recorrido, cuando un grupo de músicos exintegrantes de la Primera Banda de Música de la Gobernación del Territorio de Río Negro decidió darle forma un 1 de marzo de 1925 bajo la batuta del maestro Don José Lamérica.
La primera formación fue disuelta por razones económicas en 1932, pero fue reagrupada en octubre de 1947 bajo el liderazgo de Blas Vinci para desarrollar actividades musicales por verdadera vocación, sin remuneración. Poco a poco se fue motivando económicamente, aunque sin poder arribar a una formación adecuada y reglamentada dentro de la institución, en función de las exigencias del estatuto orgánico de las Policías de los Territorios Nacionales.
Finalmente llegó lo esperado y en mayo de 1948 se creó la Banda de Música del Territorio de Río Negro, designándose como director de la misma al Agente Vinci, merecedor por su pujanza y empeño de llevar adelante tan plausible empresa con un pequeño grupo de trece músicos.
En sus comienzos, la Banda dependía en diversos momentos de su vida institucional de distintos órganos de la Policía rionegrina, hasta que el 12 de Mayo de 1966, ya en plena vigencia jurídica de la provincia de Río Negro, es afectada a la Escuela de Cadetes. Esto decisión provocó un intervalo en sus actividades culturales y se le fijaron nuevos horizontes de proyección con la formación de una Banda de Guerra.
La nueva responsabilidad recayó en el Sargento Primero Jorge Raúl Linares, integrante de la Banda como ejecutante de primera Trompeta y que ingresara a la misma en julio de 1948, incorporando, mediante previa selección, a dieciséis músicos que se los formaron técnicamente y en poco tiempo se apreciaron los resultados ampliamente positivos. Es así que el día 25 de Mayo de 1967 se presentó la Banda de Música completa desfilando a la cabeza de la Escuela de Cadetes, con el mismo uniforme y totalmente renovada y con una Banda de Guerra de quince integrantes (nueve tambores y seis clarines) un Bastón Mayor y un orgánico acrecentado por nuevos músicos incorporados. Posteriormente pasó a depender hasta la fecha, del Departamento Secretaría General de la Jefatura de Policía.
“La banda se divide en dos partes. Por un lado tenemos los servicios a la institución, en actos aniversarios donde se ejecutan marchas militares e himnos, mientras que por otro contamos con las actividades sociales cuando nos convocan para tocar temas populares en diferentes lugares de la provincia”, contó el actual director, el Comisario Gastón Galán.
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Trascendiendo las fronteras institucionales
“La Banda se divide en dos partes. Por un lado tenemos los servicios a la institución, en actos aniversarios donde se ejecutan marchas militares e himnos, mientras que por otro contamos con las actividades sociales cuando nos convocan para tocar temas populares en diferentes lugares de la provincia”, contó Galán.
Asiste a diversos requerimientos efectuados por instituciones escolares, jardines de infantes, clubes, juntas vecinales, instituciones de bien público, municipalidades, atestiguando con su presencia inauguraciones, recepción de personalidades, recreaciones, eventos culturales, actos públicos de la fuerza provincial y del Gobierno provincial, trascendiendo la frontera rionegrina para asistir en representación de las mismas a distintos lugares del país.
Al referirse a la modalidad elegida para llevar adelante los ensayos, Galán comentó que “previamente vamos analizando la idiosincrasia del lugar que tenemos que visitar y a qué apunta el evento. Cuando nos convocan para el Día del Niño, por ejemplo, buscamos temas relacionados a la parte infantil, mientras que si nos llaman de las juntas vecinales o en un barrio buscamos de ejecutar temas populares de rock, cumbia, con un repertorio importante de varios estilos”.
“A medida que van apareciendo temas nuevos los vamos aggiornando para que suenen bien. Cuando tomamos una canción para interpretarla, hay que repartirlo en todo el instrumental de la banda, que son cerca de treinta instrumentos. Hay que buscarle la vuelta, porque cuando son temas cantados y al aire libre es difícil ejecutar la melodía cantada, pero tratamos de hacer lo mejor posible”, agregó.
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La llegada de la pandemia de coronavirus modificó el esquema de trabajo de los músicos. “Ahora con el tema de la pandemia se nos complica con los ensayos, porque los estamos haciendo en grupos y la verdad se hace difícil juntar a todos. Por eso cualquier servicio que salga tratamos de dar lo mejor”, manifestó.
La Banda se encuentra integrada por profesionales que han hecho de la música su estilo de vida, redundado en el cumplimiento de su deber de la mejor manera, lo cual se demuestra en cada presentación que realiza, poniendo el marco espectacular a todo evento organizado por los distintos entes sociales.
“Los ensayos los realizamos en grupos de nueve personas y luego nos juntamos el día del evento y vemos como sale. Hasta ahora no hemos tenidos problemas, sobre todo porque las presentaciones del año pasado fueron muy pocas”, explicó.
“Este año de a poco estamos retomando las presentaciones. En el Día de la Mujer fuimos invitados por la Comisaría de la Familia y ofrecimos un par de temas para los presentes”, cerró.
Actualmente la Banda de Música funciona con una dotación de 51 integrantes músicos y su accionar no solamente se limita a desfiles y actos protocolares, sino que también cuenta con un amplio repertorio en los que se destacan la ejecución de obras clásicas, música folclórica, tangos, jazz tradicional y música popular.
En el plano anecdótico es simbólico escuchar que “sin la Banda de Música ningún acto es igual” otorgándole así la relevancia e importancia social que la ubica en el centro de todo acontecimiento de los que participa.