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Personal del Departamento de Sustracción de Automotores, dependiente de la Dirección de Toxicomanía y Leyes Especiales, llevó adelante el secuestro de dos vehículos en operativos realizados en Viedma y en San Carlos de Bariloche, en el marco de controles de rutina.

El primer procedimiento tuvo lugar en Viedma, en horas de la mañana del lunes donde se procedió al secuestro de un vehículo que presentaba falta de documentación y una evidente adulteración en el número de motor. La medida fue dispuesta por el fiscal de turno, quien ordenó el inicio de actuaciones judiciales y que el rodado permanezca en calidad de secuestro hasta que el propietario regularice su situación.

Un hecho de similares características ocurrió en el puesto de verificación vehicular de la ciudad de Bariloche. En ese caso, personal policial detectó irregularidades en las identificaciones de motor y chasis de otro vehículo. Tras verificar los datos en la base de la Dirección Nacional del Registro de la Propiedad del Automotor (DNRPA), se confirmó que el rodado tenía un pedido de secuestro vigente por una causa de estafa seguida de hurto, requerido por la Fiscalía N° 5 de esa ciudad.

Ante esta situación, el fiscal de turno dispuso el secuestro inmediato del vehículo y la notificación de imputación al conductor, quien quedó vinculado a la causa judicial.