Bariloche.- El Cuerpo de Seguridad Vial de la Policía de Río Negro, con funciones en la Zona Andina, secuestró un vehículo Renault Sandero sobre el que regía un pedido de secuestro por hurto, el cual era conducido por la sobrina del propietario.
En un evidente conflicto de intereses familiares, el damnificado denunció en noviembre pasado que había sido víctima de la sustracción de dos vehículos – de la misma marca y modelo- y fundó sospechas en un familiar directo, a quien le había otorgado una tarjeta azul para habilitarlo a conducir.
Este jueves a la tarde personal policial de esa repartición detuvo la marcha del vehículo en el puesto del barrio Las Chacras y le solicitó a la conductora la documentación personal y del rodado para realizar las constataciones de rutina.
Gracias a la aplicación RN Seguridad Activa, los efectivos constataron fácilmente que el vehículo tenía un pedido de secuestro vigente, emitido en noviembre de 2023, por el delito de hurto.
Durante esa revisión surgió que la conductora es sobrina del denunciante quien, a pesar de ese vínculo sanguíneo, ratificó lo expresado en la denuncia y solicitó el secuestro del rodado.
El vehículo fue retirado de circulación y a la conductora la notificaron del inicio de actuaciones por presunto encubrimiento.